Es normal temer que nuestra idea de negocios sea copiada, pero ¿se puede proteger totalmente tu proyecto futuro? Realmente no, ya que no es algo que puedes salvaguardar como una cuenta bancaria, casa o vehículo. Sin embargo, existen métodos para disminuir los riesgos.
Convierte en realidad tu idea
Si ya has planificado tu proyecto y definido los pros y contras, el público objetivo, comercialización, producción, etc, entonces debes llevarlo a la acción. Esto te dará la ventaja sobre la posible competencia, establecerás a tus consumidores, generarás ganancias e irás moldeando el rumbo de tu marca.
Redacta un acuerdo de confidencialidad
A muchos emprendedores les preocupa compartir su idea de negocios con desconocidos o posibles inversores sin ningún tipo de garantía. Un acuerdo de confidencialidad es una protección jurídica que sirve para que la otra parte no divulgue nada sobre tu proyecto sin tu debida autorización. Busca plantillas en Internet y luego pídele a tu abogado que lo redacte.
Acuerdo de empleo
Es un documento que exige al empleado no compartir con otros información o datos comerciales internos de la marca que generen una ventaja competitiva. Al momento de contratar, asegúrate de que junto al contrato se anexe el acuerdo de empleo y que esté bien redactado.
Registra tu marca
Un registro de marca sirve para proteger los aspectos que sirven para identificar y distinguir tus productos o servicios de la competencia, estos pueden ser palabras e imágenes, los cuales incluyen, por supuesto, el nombre y el logo.
Utilización de patentes
La patentes son licencias especiales que permiten a tu marca comercializar un producto por un periodo de tiempo determinado; al optar por una, tu idea de negocio, que contiene aspectos originales, puede ser protegida ante el surgimiento de productos similares hechos por otras empresas.
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