El marketing de influencia se refiere a las campañas publicitarias que se realizan con influencers, los cuales promocionan los productos o servicios de alguna marca a través de sus redes sociales, obteniendo con esto una gran remuneración.
Para que las interacciones de los influencers, dentro de las redes, sean consideradas como marketing de influencia, deben contener dos aspectos: control editorial y compensación.
Control editorial: Son las propuestas realizadas por las marcas para establecer el tono y dirección que llevará el mensaje durante la promoción del producto. Al compartirlas y validarlas con el influencer, este tendrá la potestad de amoldar estas sugerencias a su contenido.
Compensación: Son los diferentes métodos de pago que emplea una marca para retribuir las acciones publicitarias hechas por el influencers. Estas formas pueden ser: dinero, productos o servicios gratuitos.
Sin embargo, puede ocurrir que algunos de estos influencers realicen publicaciones en las que el marketing de influencia no sea identificable, generando así una confusión en el consumidor. Por ello, la Alianza Europea de Estándares Publicitarios (EASA) delineó los aspectos que servirían para identificarlas y regularlas:
Colocar etiquetas específicas
Esto permitirá al consumidor reconocer que la publicación compartida en las redes tiene intención comercial.
Plasmar la intención de la publicación
Se debe divulgar el objeto del anuncio, incluyendo elementos como: ubicación, tiempo y frases para determinar si el contenido es netamente publicitario.
Pautar las condiciones del contrato
La marca debe plasmar en un contrato lo que busca del influencer y como lo indemnizará. Dicho documento se firmará antes del inicio de la campaña publicitaria.
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