Sabemos que la publicidad es la promoción de productos, servicios o ideas con el objetivo de persuadir al público objetivo. Su propósito principal es generar interés y finalmente impulsar al público a adquirir un producto o servicio. La publicidad está tan presente en nuestras vidas que incluso repercute en nuestros patrones de consumo, y es justamente de eso de lo que vamos a hablar en este artículo.
La publicidad y los patrones de consumo
No es secreto para nadie que los anunciantes utilizan estrategias que apelan a las emociones y necesidades básicas de las personas para crear un vínculo entre el producto y el consumidor, pero, ¿cómo lo hacen?
Las emociones
Las emociones juegan un papel crucial en la toma de decisiones de compra. Los anuncios que despiertan emociones positivas, como la felicidad o la nostalgia (bastante poderosa en el mundo del marketing), tienden a ser más efectivos. Por otro lado, las historias emotivas también pueden ser efectivas, un ejemplo de esto son esos anuncios en donde se ven a algunas personas contando anécdotas muy personales con las que podemos empatizar o incluso sentirnos identificados. Todo esto aumenta la probabilidad de que el producto quede en la mente de los consumidores.
Las necesidades
Con frecuencia, los productos se presentan como respuestas a dilemas que los consumidores desconocían por completo. Esta estrategia no solo impulsa la compra, sino que también moldea los patrones de consumo. Seguro que has visto antes este tipo de anuncios, un ejemplo son esos productos de limpieza cuyo comercial empieza con el típico: “¿Sabías que tu hogar acumula más gérmenes de los que imaginas?”, para luego presentar su producto como la solución definitiva. Este enfoque apunta directamente a la necesidad de mantener un entorno limpio y saludable, generando así una sensación de necesidad en el consumidor.
Estrategias para hacer más efectiva la publicidad
La publicidad emplea diversas estrategias para lograr su objetivo persuasivo.
Usar caras conocidas
La asociación de celebridades con un producto puede influir enormemente en las opiniones y decisiones de compra de las personas. Ver a un famoso muy querido promocionando un producto es algo que transmite confianza al consumidor, lo cual hace que este se vea más incentivado a adquirir el producto. Hoy en día no nos damos cuenta, pero sin duda esto ha moldeado los patrones de consumo de nuestra sociedad en general, haciendo que la estrategia nunca pase de moda.
La “escasez”
Esto en el mundo de la publicidad es bastante básico pero también efectivo. Crear un sentido de escasez o urgencia puede motivar a los consumidores a actuar rápidamente. Ofertas por tiempo limitado o productos en ediciones limitadas generan la sensación de que deben aprovechar la oportunidad antes de que sea demasiado tarde.
El Consumo en nuestros días
Está claro que todas las estrategias planteadas anteriormente son efectivas y han moldeado nuestros patrones de consumo con el tiempo, pero hay un factor más a tener en cuenta, y es la era digital en la que vivimos.
Publicidad en Redes Sociales
Hoy en día la gran mayoría de personas pasan una parte importante de su día en las redes sociales, y la publicidad (incluso la que no es explícita) que vemos en estas redes diariamente hace que inconscientemente seamos influenciados en nuestros patrones de consumo. Hoy en día las redes sociales se han convertido en un canal poderoso para llegar a audiencias específicas y personalizar los anuncios según los intereses y comportamientos de los usuarios.
Además, aunque no lo notemos, cuando vemos a nuestros amigos o contactos en línea compartiendo experiencias con productos o servicios, ya sea ropa de marca, algún teléfono nuevo o lugares de moda, puede despertar en nosotros el deseo de tener esas mismas experiencias, y es ese deseo el que poco a poco se va transformando en un patrón de consumo que muchas marcas aprovechan para promocionar sus productos y servicios.
Cuidar nuestros patrones de consumo
Es esencial ser conscientes de cómo la publicidad influye en nuestros patrones de consumo. A medida que avanzamos como sociedad, la publicidad y las estrategias detrás de la misma también avanzan, por lo que siempre estamos expuestos a mensajes persuasivos. Por esto, es importante tomar buenas decisiones a la hora de comprar para que no terminemos adquiriendo cosas poco necesarias, ni desarrollemos patrones de consumo dañinos, como lo pueden llegar a ser las compras compulsivas.
Si quieres saber más sobre estrategias de publicidad con las que convivimos en el día a día, asegúrate de visitar nuestro sitio web.
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