Se acercan tus vacaciones anuales y, desde ya, estás planificando todos los detalles. Has revisado todos los posibles destinos y elegido las actividades a realizar. El problema empieza cuando te das cuenta de todos tus pendientes a nivel laboral. Tienes mucho por hacer antes de tomar tu merecido descanso; las tareas parecen interminables y no sabes por dónde iniciar. Lo más recomendable es dejar todo al día. De esta manera, podrás despejarte y disfrutar sin llevar tu laptop debajo del brazo, al estilo de la película Locas vacaciones sobre ruedas, con el fallecido Robin Williams. Toma nota de estos tips y olvídate –por unos días– del estrés de la oficina.
¿Cómo me organizo?
Revisa tu calendario
Inicia por contabilizar los días que estarás ausente y tus obligaciones en ese periodo. Revisa tus labores del día a día para detectar cuáles podrían verse afectadas.
Realiza una lista de quehaceres
Luego de tener el detalle de tus días fuera del trabajo, enumera tus responsabilidades; este paso te ayudará a tener todo previsto y que ningún detalle se quede por fuera.
Toma medidas
Al terminar de revisar tu lista, prepárate para determinar cómo harás cada cosa. Ten a la mano tu agenda y establece un día para cada actividad extra. Por ejemplo: “Hoy, al finalizar mi jornada, me quedaré por un par de horas extras y adelantaré hasta este punto”. Procura abarcar la mayor cantidad posible. Si necesariamente debes llevarte algo a tus días libres, que sea lo mínimo.
Busca herramientas
Según sea tu área laboral, hay alternativas que podrían librarnos de muchos dolores de cabeza. En la parte digital, por ejemplo, existen un montón de aplicaciones para ayudarte a programar tu contenido y se publiquen en la fecha y hora prevista. Solo deberás monitorear que todo marche bien y ¡listo!
No dudes en pedir ayuda
Si de verdad consideras que es demasiado la carga y no puedes lidiar con tanto, pide que te asignen algún colaborador o prueba con la opción de un suplente. Esto deberás contemplarlo con tiempo de antelación para que reciba la inducción adecuada. No lo tomes a la ligera: revisa bien quién sería la persona perfecta para esta tarea. Al fin y al cabo estará tomando tu lugar.
Comunícate con tus clientes y equipo
Además de todas nuestras labores individuales, es vital mantener las buenas relaciones con clientes, proveedores y compañeros de trabajo. De esta manera, evitaremos fallas comunicacionales y posibles inconvenientes. Si tienes clientes en tu haber, avísales sobre tu ausencia e indícales con quién podrán comunicarse ante cualquier solicitud. También sería oportuno programar una respuesta automática en tu correo corporativo o personal. Por otra parte, reúne o informa a tus compañeros. Es posible que deban auxiliarte ante cualquier situación de contingencia.
Organiza tu espacio
Deja tus cosas recogidas y ordenadas. Guarda lo más delicado y que podría romperse o perderse. Si es necesario, llévate algunas de ellas a casa.
Por último, pero no menos importante, ¡relájate y disfruta! Trata de aprovechar esos días de descanso, despéjate, libera tensiones y planifica tiempo en familia. ¡Felices vacaciones!
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